Relatos

Padre Las Casas

El municipio de Padre Las Casas, enclavado junto a la Cordillera Central en el Sur de la República, podría constituirse en uno de los mayores recursos económicos si como se espera, se explotan con éxito las minas de manganeso, cobre y oro que se hayan en Las Cañitas.

En un trabajo que publica el colega periodista Guillermo Germán Casado, se señala que «esas minas fueron exploradas hace algún tiempo por un técnico francés, el cual las denominó con el nombre de La Fortuna, al considerar que allí existe una verdadera fortuna en cobre».

Para muchos, de esos yacimientos depende el porvenir de Padre Las Casas, por lo que sería conveniente que el gobierno reanudara los trabajos de explotación que inició en el 1960. Allí podrían emplear no menos de tres mil obreros y un personal técnico o de oficina bastante numeroso.

Las Cañitas está a unos 30 kilómetros de Padre Las Casas y tiene ya una vía de comunicación, aunque hay que repararla por algunos sitios.

Con esta misma vía de comunicación podrían unirse las regiones del Sur del Cibao, pues para enlazar a Constanza con Padre Las Casas únicamente habría que construir unos 30 kilómetros de carretera que abriría nuevos mercados a esa zona agrícola que es tan importante. Esta vía podría brindar al viajero diversidad de paisajes, ya que atraviesa la Cordillera Central.

Padre Las Casas es una común perteneciente a la Provincia Azua.

La población fue fundada hace varios siglos por un español de apellido Cuevas, secundado, entre otros por Tomás de Alcántara, Jacinto Lebrón, Manuel Segura y Elena Lafalge, ésta última de origen español.

Se asegura que esta región era sitio de grandes rebaños de ganado silvestre.

Padre Las Casas, nombre de un sacerdote español que vivió allí muchos años, fue elevado a Distrito en e11927.

Antes del nombre actual se le llamó Túbano, debido a que la región era productora de tabaco y, por tanto, se elaboraban los llamados túbanos o cigarros.

Esta zona fue habitada por los indios pertenecientes al Cacicazgo de Maguana. Todavía existen allí reliquias que comprueban la vida indígena.

En la Sección Los Indios, a poca distancia de la población, existía un batey que se dice que era usado por los indios para el juego de pelota.

Asimismo en las secciones de Monte Bonito y Guayaba aún existen monumentos erigidos por los indios. En la primera existe una enorme piedra en forma de tribuna con escrituras y símbolos que a la fecha no han sido descifrados.

Periodistas y arqueólogos han visitado estos sitios atraídos por esos vestigios indigenistas.

Padre Las Casas fue elevado a común en el año 1947. Sus principales productos son café, habichuela, maíz, arroz y otros.